“El preparador es un 20% y el opositor un 80%…”
Tuve que aprender sobre esto con 4 años opositando, ojalá no esperes tanto, y si esto ayuda, genial.
Voy a recalcarte algo importante. No es lo mismo opositar para la Administración General del Estado que para las Comunidades Autónomas. Y no es igual un subgrupo A1 que un A2 ni C1 o C2. Grábate esto a fuego.
Con respecto a mí, empecé a opositar para un subgrupo A1 (concretamente al Cuerpo Superior de Inspectores de Trabajo y Seguridad Social, consta de 240 temas aprox. y 5 ejercicios) y todos los niveles A1 conllevan exámenes orales donde la figura del preparador, porque en estos casos suele ser más personal, es muy primordial.
Si vas a empezar una oposición de tal envergadura debes elegir muy bien aquella persona en la que vas a confiar, y a la que, en cierta medida, le vas a dar el control de tu vida. Y sí, digo control, porque aunque habrá ocasiones que tú mismo sepas que es mejor, también te dejarás guiar, qué ritmo llevar o qué temas ver, serás una esponja que absorba toda información y te maldecirás mil y una veces si no llegas a aquello preestablecido como idóneo, y esto puedes aplicarlo tanto a un subgrupo A1 como A2.
Y aquí voy a señalarte que mires números de aprobados o si acaba de empezar cuánto tiempo tardó él mismo en sacar su plaza, cuál es su historia, qué temario maneja, cuál es su ritmo, por cual sistema aboga (vueltas o arrastre) método, como se organizan los ejercicios, con qué tiempo debes presentarte por primera vez, ¿te añadirá material de soporte: esquemas, resúmenes, etc.?…habla con otros opositores, pregunta, indaga con conocidos o ve a bibliotecas y échate mil y un cafés con tal de empaparte bien, busca en internet (foros, redes sociales…) da igual, pero trata de conocer bien con quién empiezas.
Y una vez ya lo tengas, aquí va la clave; no te cierres, continúa hablando, no seas chismoso pero consulta siempre, repite el proceso que te acabo de exponer si llegado un punto ves que no avanzas, NO tengas miedo, vuelve a salir y busca preparador. No es lo mismo cambiar una vez tocado fondo que cuando empiezas a estacarte, menea culo, genérate presión, porque eso se traduce en sacar plaza o echar un jodido año más de vida.
Un preparador será la base para sacar la oposición o no, no pueden fallar los cimientos, y si fallan, lo notarás, maldecirás tiempo ido y precisamente para un opositor prima poco. Debes tener la certeza de que sois un equipo, te entiende a nivel psicológico, se implica 100% y te exige 100% pero a la vez sabe cuando estás en la mierda, se encarga de que sus propios opositores hagan piña, habla claro, se ciñe a resultados y los reflexiona contigo, aconseja abiertamente y también invita a temporadas de descanso/reflexión si ve que no estás dando lo que una oposición requiere. Será como un padre en la oposición, tu tutor, debes verlo como ejemplo a seguir, querer lo que él tiene, poder conversar de temas banales o contarte anécdotas del futuro trabajo que desempeñarás, debe motivarte, hacer ameno el aprendizaje.
Por último recordarte que en el camino de la oposición no le debes nada a nadie, (estrictamente a la preparación me refiero) son años de tu vida, y tu objetivo debe ser sacar la plaza, por eso te metiste en esto. No se trata de intentar, sino de hacer, y con buenas formas siempre podrás ir y volver a un mismo preparador.
Y ahora, ¿recuerdas la pregunta del inicio?…yo lo dejaría en un 50% para ambos.
